"Creéme, si estás leyendo esto, por muy mal que la vida te trate, por muy injusto que se muestre el destino, no desearías jamás estar en mi pellejo"
✿ Título: Al otro lado del cristal
✿ Saga: Colección de relatos
✿ Autor: Juan Manuel Peñate Rodríguez
✿ Editorial: Círculo Rojo
✿ ISBN: 9788490505427
✿ Fecha publicación: Octubre 2013
✿ Número de páginas: 483
✿ Género: Fantástico, Terror, Paranormal, Ciencia-Ficción
En La pala, un ritual es llevado a cabo por los habitantes de un pueblo remoto, un secreto compartido que va saltando de uno a otro; el protagonista de Dios Roco se convierte en testigo involuntario o nexo de unión entre dos mundos destinados a no conocerse nunca; dos mujeres muy dispares tienen que hacerse a la idea de convivir bajo el mismo techo, la situación lo requiere, pues afuera, Al otro lado del cristal... Una lucha encarnizada por la supervivencia es desplegada a través de un macabro juego al que El jugador pesimista, junto con otros, tendrá que hacer frente, algo que lo marcará de por vida; en Tercera planta, por favor acompañaremos a alguien cuya memoria hace mucho que lo abandonó en su descenso al siguiente infierno; una institución mental es siempre lugar de confesiones susurradas cuyas paredes encierran anécdotas misteriosas y leyendas urbanas que nadie creería, sin embargo, es la persona que habita En la celda de colores la que guarda la más inquietante de las historias; ¿hasta qué punto llegarían unos por impresionar a otros? En Touchdown alguien cruzará esa delgada línea, demostrando una vez más que la estupidez humana no conoce límites.
Estos siete relatos —tres de ellos novelas cortas— representan la ópera prima de su autor, un surtido de emociones y escalofríos que abarcan géneros tan diversos como el suspense, la fábula, la ciencia-ficción, el fantástico o el terror.
No soy mucho de leer relatos, no porque no me gusten, sino porque, como Filóloga Hispánica que soy, suelo ser bastante exigente con las lecturas que realizo y considero que los relatos y las novelas cortas son incluso más difíciles de escribir que una novela de 800 páginas.
En muy poquísimas páginas el autor me tiene que convencer del argumento, hacerme empatizar con los personajes y con las situaciones que están viviendo y además estructurarlo todo de tal forma que no parezca que falta algo. Me parece complicadísimo.
Sin embargo, Juan Manuel Peñate Rodríguez, en su obra Al otro lado del cristal, ha conseguido todo eso y más, porque el autor no se conforma solo con contarnos varias historias, sino que, además, con cada una de ellas, consigue arrancarnos varios tipos de sentimientos y sensaciones y nos obliga a hacer un trabajo profundo de reflexión cada vez que terminas con cada lectura.
La primera historia con la que nos encontramos se titula La Pala. Ocupa solo 26 páginas por lo que no os voy a contar más de lo que se dice en la sinopsis para no destrozar la historia. Su forma de contarla, el misterio, el sentimiento de desasosiego y desolación que te provoca me ha recordado mucho a unos de los maestros del realismo mágico hispanoamericano, Horacio Quiroga. La mención a un ritual para salvarlos deja abierta la posibilidad de un montón de interpretaciones por parte del lector y eso es algo que me encanta (Que le vamos a hacer, soy masoquista: adoro los finales abiertos en los que es el lector el que tiene que sacar sus conclusiones para discernir qué es lo que ha pasado o está pasando). Destaco sobre todo el uso del diálogo más que de la narración, algo que se agradece mucho porque hace que la lectura sea ágil y rápida.
"¿Desde cuándo?, se preguntó. ¿En qué momento empezó todo?... Sí, ya lo sabía. No con toda certeza del mundo pero, de algún modo, lo sabía... [...] Desde que eso hubiera venido para ayudarlos... Desde que eso - aquello de lo que no se podía pensar en voz alta - hubiera venido para salvarlos de sí mismos"
Dios Roco es una fábula con unos personajes muy carismáticos que me han sacado más de una sonrisa. En estas otras 26 páginas se nos plantea una gran reflexión relativista: ¿Y si el mundo que conocemos en realidad es un micromundo dentro de un mundo más grande?
"Roco alzó la cabeza hacia la profundidad de la noche, con los ojos puestos en aquella bola amarilla suspendida en la oscuridad (quién sabe si el lunar de otro Roco gigantesco), y, de nuevo, con otro suspiro de resignación, se dijo para sus adentros: <<humanos>>"
A continuación nos encontramos con la primera novela corta que da título al conjunto de relatos: Al otro lado del cristal, donde vivimos la soledad, el miedo a lo desconocido, la ausencia de información, la necesidad de supervivencia de dos hermanas que hasta entonces no tenían mucha relación y que ahora, por un factor externo, deben convivir juntas completamente desconectadas del mundo exterior. La historia se desarrolla en un entorno post-apocalíptico y me ha recordado mucho al comienzo de una película protagonizada por el grandísimo actor Will Smith, en la cual lo que prima no es la acción, sino los sentimientos de los protagonistas ante esa nueva situación. Con unas escenas muy crudas y un final que te deja los pelos de punta.
"Aquel íntimo sentimiento de protección, de cobijo, de salvación, volvía a estar ahí, tras sus párpados cerrados, al igual que la angustia, el sentirse maldita, confinada y muerta en vida"
Le sigue otra novela corta, en la cual, a diferencia de la anterior, tenemos más acción. En El jugador pesimista, unos jóvenes que en algún momento han deseado con fervor morir, tienen que luchar para poder vivir. Creo que es una historia que se podría desarrollar mucho más y constituir una novela independiente. En ella nos encontramos los horrores de la guerra pasando por un montón de escenarios y de épocas distintas pensadas para que los jugadores, que van saltando de un escenario a otro a medida que pasan las partidas, aprendan a valorar la vida.
"-Una especie de curso intensivo para aprender a valorar lo único que de verdad importa. [...] Una lección de vida a través de la senda de la muerte"
En Tercera planta, por favor, el autor vuelve al relato y para mí es el mejor de todos. Con una narrativa exquisita, en solo 14 páginas, el autor, apelando directamente al "tú", te adentra en una atmósfera terrorífica y opresiva donde el protagonista, sin poder hacer nada para remediarlo, se ve llevado de un lugar horrible a otro más horrible aún haciendo referencia a los nueve círculos del infierno que Dante supo llevar a su máximo exponente.
"Si alguna vez creíste conocer el verdadero significado del sufrimiento... Olvídalo todo, lo que sabes o lo que crees saber. Tendrías que estar aquí para ver esto."
En la celda de colores nos encontramos con una novela corta de corte paranormal. A pesar de estar perfectamente estructurada con ese círculo cerrado, y de esa fantástica escena en la "visita" que consigue ponerte el vello de punta, es la que menos me ha gustado, (posiblemente por la lectura precedente, puesto que pasa de una historia que dice más por lo que no cuenta que por lo que cuenta, a otra que te lo da todo masticadito). Creo que es una historia que está más destinada a entretener que a hacerte pensar como me ha pasado con el resto de lecturas y, posiblemente, eso sea lo que me ha chocado y lo que no me ha permitido disfrutar de ella.
"-Existen fuerzas, Wanda, fuerzas siniestras que no deberían existir pero que están ahí, donde nadie sabe de ellas, y créeme, escapan a toda lógica o ley existencial"
Como colofón final, Touchdown, un relato corto de 28 páginas en el que para nada te esperas ese final tan impactante que te deja con la boca literalmente abierta.
"Puede que el rasgo que más los destacara fuera esa disposición para hacer el gamberro. Por separado [...] eran chicos responsables [...] pero cuando el destino los juntaba eran como niños grandes y, como tal, parecían atraer las situaciones más desastrosas y disparatadas, dando esa constante impresión de que, cuando coincidían, cualquier cosa podía ocurrir"
En conclusión: Al otro lado del cristal es una colección de relatos y novelas cortas que me ha dejado impactada. El estilo narrativo de Juan Manuel Peñate Rodríguez es de una calidad asombrosa, (es increíble que sea su primer libro publicado), con la primacía de unos diálogos exquisitos y unas descripciones de lugares y situaciones que te meten de lleno en las historias como si realmente estuvieses dentro de ellas viviéndolas. Absolutamente todas, unas más que otras pero todas, han conseguido arrancarme sentimientos que muy pocas novelas han conseguido hacerlo anteriormente. Terror, angustia, miedo, claustrofobia, impacto... e incluso alguna sonrisa que otra, son emociones que salen a relucir leyendo estos relatos. Estoy deseando que el autor publique más cosas para poder disfrutar otra vez con su pluma y con su imaginación.
Muchas gracias a Montse de
Amor y Palabras por organizar esta Lectura Conjunta porque sin ella este maravilloso libro no hubiese caído nunca en mis manos y hubiera sido una gran pena. Lo recomiendo muchísimo, sobre todo a aquellas personas que les guste que les sorprendan, les intriguen, les impacten y les hagan reflexionar sobre lo leído.
Juan Manuel Peñate Rodríguez. Ya insomne en su juventud, este sevillano empieza a interesarse por el mundo de los libros desde adolescente, ocupando sus noches escribiendo historias y retales sueltos de imaginación, cuando su mente trabaja con mayor lucidez. No obstante, no es hasta años más tarde cuando decide dar un paso más y tomarse en serio la idea de escribir ese libro que poco a poco va forjándose en su cabeza. Apasionado de la lectura y el cine, la ilustración y la escritura, este, su primer trabajo, no es sino la punta del iceberg de esa imaginería que desea ser transcrita a papel, con la mayoría de sus cuentos inspirados en sueños que ha tenido a lo largo del tiempo. Según asegura, el mérito no es suyo sino del duende invisible que, cuando mejor le parece, crea situaciones a partir de imágenes mientras uno duerme profundo.
«Escribe exactamente el libro que a ti te encantaría leer», leyó una vez en alguna parte. A día de hoy sigue pareciéndole el mejor consejo literario que jamás ha recibido. El libro que sostienes entre tus manos es el fruto de querer plasmar dicho pensamiento.
Bsos!